Las acciones armadas llevadas a cabo por las organizaciones palestinas dentro de las fronteras del Estado de Israel hoy son noticia. Son noticia porque Israel ha vivido en sus carnes por primera vez en mucho tiempo lo que el pueblo palestino vive desde hace décadas. Hasta el pasado sábado, las fuerzas armadas israelíes o las fuerzas paramilitares lideradas por colonos asesinaron durante todo el año 2023 a 268 ciudadanos palestinos, de los cuáles la mitad eran menores de 14 años, pero eso nunca fue noticia. No hubo condenas. No hubo reproches ni sanciones. El Estado de Israel siguió paseándose por los organismos internacionales sin padecer ni la más mínima condena.
El mundo entero ha sido testigo, durante más de siete décadas, cómo el Estado ocupante y su gobierno fascista han agredido al pueblo palestino (mujeres, niños y ancianos) mediante asesinatos, arrestos y desplazamientos, cómo han ocupado su tierra, cómo se comprometieron en la colonización y los asentamientos, profanaron sus lugares sagrados, islámicos y cristianos, derramaron sangre palestina, violaron los derechos de sus prisioneros y prisioneras, reprimieron sus justas demandas, todo mientras los gobiernos e instituciones del mundo permanecían en silencio y fracasaban. Algo que envalentonó a los ocupantes a intensificar sus actos de terrorismo y agresión a un nivel sobre el que nadie debería guardar silencio.
Nosotros y nosotras, personas libres y conscientes de que no podemos ponernos de perfil cuando uno de los ejércitos más poderosos del planeta pone la bota sobre un pueblo que aspira a su liberación, ante esta nueva agresión del Estado sionista y su guerra abierta contra el pueblo palestino y el resto de pueblos que declaren su solidaridad, impulsadas por nuestra responsabilidad de defender el derecho de los pueblos a su autodeterminación y a la resistencia, saludamos desde aquí a todas las organizaciones palestinas embarcadas en esta histórica ofensiva, independientemente de los métodos de lucha empleados. Las organizaciones palestinas tienen el derecho legítimo para defenderse a sí mismos, a su tierra y a sus miembros, a la luz de la continua agresión de la ocupación y del silencio y fracaso del mundo a la hora de poner fin a su creciente terrorismo y su negación de todos los derechos del pueblo palestino y sus aspiraciones.
En este contexto, renovamos nuestro llamado a todos los pueblos del mundo, a sus organizaciones políticas, sindicales y asociativas para que asuman sus responsabilidades, y contribuyamos junto a los palestinos y palestinas hagan justicia y apoyen su lucha legítima por la libertad y la autodeterminación, para establecer un Estado independiente, justo y plenamente soberano, con Jerusalén como su capital, y poner fin al destierro y al oprobio que desde hace décadas sufren.
Viva la lucha del pueblo palestino. – Guadalajara, 10 de octubre de 2023.
Centro Social Octubre 